viernes, 9 de diciembre de 2011

Individuos

Hoy termina en Sudáfrica la cumbre del clima de Durban y quizá en circunstancias diferentes ahora estaría escribiendo una entrada dolida e indignada. No me malinterpretéis, estoy muy molesta y me fastidia como a cualquiera que nos engañen año tras año asegurando que negociarán, cuando al final todo lo que son estas reuniones son unas vacaciones pagadas estupendas para los señores mandamases.
Sin embargo, llega un punto en que ya no esperas nada de ellos ni te crees lo que te dicen. Crisis política, decía Toni Garrido, por encima incluso de la económica. La gente ya no cree en los Gobiernos. Y ellos se lo han buscado. 
Reflexionando sobre el futuro del planeta, sobre la impotencia que siento al saber que todo está en manos de estos señores a los que sólo les importa el dinero y sobre muchos otros asuntos relacionados, acudió a mi mente una cita que hace tiempo rescaté de una conferencia de la activista Severn Suzuki:

“Los años han pasado y no parece que la situación global haya mejorado nada, y yo me he hecho mayor y poco a poco me he dado cuenta de que el cambio real no se produce en estas grandes cumbres internacionales, el cambio real no sale de esta suntuosidad, ni lo ordenan esos líderes políticos. La única forma de que el cambio real ocurra es que los individuos y grupos de individuos decidan hacerse responsables de sus propias comunidades".

Estamos en tiempos enrarecidos, en momentos de cambios, pero no se sabe muy bien de qué tipo. Al final, si queremos cambiar el mundo, lo primero que tenemos que cambiar es nuestra propia forma de hacer las cosas. Comenzar por nosotros mismos y, después, trasladar nuestras ideas a quienes nos rodean. Quiero pensar que todavía podemos sorprendernos positivamente.

2 comentarios:

  1. El cambio está un poco en la educación, ¿no? Ya no sólo reeducar a los que lo tenemos en la mano ahora (aunque cuánto más antigua sea la generación, más difícil suele volverse), sino educar a los más pequeños o a los que están por venir.

    A mí me da igual lo que hagan esos señores que seguramente, no representan a ninguno de nosotros, a mí lo que me interesa es que aunque yo me haya molestado en poner tres bolsas en casa (por poner un ejemplo) y en haber explicado qué echar en cada una, o bien por desconocimiento o bien porque les da igual, siguen tirando donde quieren.

    O que aunque tengo frío por las noches, lo arreglo con una sudadera y no tiro de la calefacción. Y eso que yo nunca he sido "la más comprometida" en estos temas pero creo que tenemos que empezar a cambiarlo por nosotros mismos y que haciéndolo poquito a poquito, puede ser posible.

    Pero desde luego, la solución no está en esas cumbres, está en la sociedad y en nosotros como parte de ella.

    ResponderEliminar
  2. Estoy de acuerdo contigo. Y sí, la educación juega un papel muy, muy importante, aunque como dices es complicado hacer reflexionar a las personas que han alcanzado una cierta edad.
    Estos cambios, además, son necesarios a nivel económico, tal y como están las cosas.

    ResponderEliminar

Al comentar en este blog, manifiestas conocer y estar de acuerdo con la Política de Privacidad del mismo.