La Navidad es mi época del año favorita. Termina una y ya estoy deseando que llegue la siguiente, a pesar de lo rápido que se pasan ahora que soy adulta y de que en mi familia la ilusión sólo la mantenemos una minoría. Y no concibo una Navidad sin regalos: aunque sea un detalle pequeño, aunque simplemente se trate del gesto, tengo que regalar y tengo que colocar cosas bajo el árbol. Este año, mi madre me ha dicho que no quiere nada; y aquí estoy yo, comiéndome la cabeza para encontrar algo que no tenga mucho valor ni ocupe demasiado espacio que pueda darle a modo de detalle. Los regalos me fascinan; recibirlos, por supuesto (amo las sorpresas), pero especialmente darlos. Y no se me da bien expresar mis sentimientos por medio de palabras (orales; estoy trabajando en ello), pero creo que soy bastante detallista.
Así que se me ha ocurrido inventarme un tag sobre regalos literarios y os invito a que lo copiéis si os apetece. No me demoro más y paso a hablaros de algunos de los obsequios literarios que he dado y recibido:
1. Último libro que regalaste
No estoy segura de si ha sido el último, pero el año pasado le regalé a mi amiga Mai la novela Stardust, de Neil Gaiman; es una historia llena de magia, con ciertos puntos infantiles pero en absoluto para niños, y a la que yo estoy segura de que volveré más de una vez. Es de esas narraciones tan redondas, tan bien narradas y cerradas, que nunca quieres que se terminen.
2. Último libro que te regalaron
Mi hermana me regaló en el mes de agosto, por mi cumpleaños, Grimorio: brujas y hechizos de Benjamin Lacombe y Sebastien Perez. Es una cajita que contiene dos volúmenes: un cuento y el grimorio del que el cuento habla. Me gustó mucho más este último, que reinterpreta las vidas de algunas mujeres famosas y misteriosas de la historia al tiempo que añade otras inventadas. Las ilustraciones de Lacombe, como siempre, son maravillosas.
3. Libro que regalaste por un cumpleaños
Le he regalado varios libros de gatos a mi hermana en ocasiones diversas. El primero que se me viene a la cabeza es Cat Out of Hell de Lynne Truss. No lo he leído y no sé si ella lo ha hecho todavía, por lo que no puedo aportar una opinión.
4. Libro que te regalaron por un cumpleaños
Muchos, pero el primero que se me ha ocurrido es The Diary of Edward the Hamster. Me lo regaló mi amiga Mine cuando mi pequeñín todavía estaba en plena salud y me hizo muchísima gracia porque era muy fácil reconocer rasgos del comportamiento de estos animales en la novela. Si tenéis hámster, es muy disfrutable.
5. Libro o autor del que te han regalado merchandising
Tengo bastante merchan literario, pero me lo he comprado yo. Así que me voy a los orígenes: cuando era adolescente y nació mi obsesión eterna con Tolkien y El Señor de los Anillos, mi madre me regaló no uno, sino dos Anillos Únicos. El primero lo adquirí en la tienda friki local y la calidad no era muy buena, aunque traía una cajita preciosa que conservo; el segundo se empeñó ella en que fuera de plata y lo llevo puesto todos los días, y así será en el futuro. No puedo salir de casa sin ese anillo.
6. Autor que descubriste gracias a un regalo
No se me ha ocurrido ninguno que haya seguido leyendo, así que he hecho una pequeña trampa. Cuando tenía doce o trece años, mi amigo Rubén me prestó La Historia Interminable de Michael Ende diciendo que me iba a sentir completamente identificada con Bastian y que iba a amar el libro de comienzo a fin. No era un regalo, pero estuvo tanto tiempo en mi estantería (¿sigue ahí?), que casi. Me enamoré de Ende en esa primera lectura y he leído algunos otros títulos suyos; he repetido muchas veces y tengo todavía muchísimo que descubrir de él. Me fascinan sus mundos, las ideas que hay detrás de esa fantasía tan bien hilada y su manera de narrar.
7. Libro que regalarías a cualquiera
El Hobbit. Del tirón. Es un cuento muy sencillo, una historia de aventuras con personajes entrañables, y criaturas que nos remiten al folklore nórdico que los niños españoles hemos mamado gracias a series de animación como David, el Gnomo. Es, además, un relato de superación, de amistad y de camaradería. También sienta unas bases muy accesibles para entrar en el mundo de El Señor de los Anillos y me parece una manera ligera de conocerlo y de enamorarse de él.
En esta misma línea, también regalaría a cualquiera Las Aventuras de Robin Hood de Howard Pyle.
8. Libro que regalarías a alguien que ama viajar
Casi cualquiera de Jules Verne, pero voy a señalar el primero que leí de él: Las Tribulaciones de un Chino en China. Creo que es una novela que incluye los elementos más característicos y entrañables del autor francés: suspense, comedia, personajes muy bien caracterizados e identificables, inventos cyber-punk y un ritmo vertiginoso. Es un libro de aventuras que nos relata la huida de un hombre para evitar su propia muerte; el único detalle: que él mismo desea su muerte. Me maravilló este primer encuentro y ya no me gusta estar demasiado tiempo sin entrar en la cabeza de Verne. Es uno de los mayores divertimentos que tengo en la vida.
9. Libro que regalarías a alguien que ama la música
Uno de los últimos libros que me han enamorado es la distopía Station Eleven de Emily St. John Mandel. En un mundo post-apocalíptico donde los seres humanos supervivientes se ven forzados a empezar de cero a construir comunidades y a colocar los pilares de su existencia, una compañía de músicos y actores conocidos como Traveling Symphony se dedica a hacer camino entre las distintas poblaciones para compartir el teatro de Shakespeare. Dentro del contexto de la novela, empapado por las reflexiones de sus personajes y por cómo les han afectado los sucesos a los que han tenido que enfrentarse, el papel de esta Sinfonía ambulante que lleva a la gente las artes escénicas es crucial y demuestra la importancia de la ficción y la cultura en nuestras vidas.
10. Libro que regalarías a alguien que ama los animales
La novela gráfica Sad Animal Facts de Brooke Barker recoge una lista de datos sobre animales diversos (el libro está dividido en grupos: mamíferos, anfibios, peces...) que a priori nos podrían poner tremendamente tristes por la impotencia que generan en cuantos amamos a los animales. Sin embargo, Barker, que fue la primera deprimida al enterarse de estas cosas, les da un giro acompañando la información de dibujos muy divertidos y tiernos que no podía dejar de instagramear a medida que los descubría. Es una pequeña maravilla.
Sí, soy consciente de que me repito muchísimo con los títulos, pero no puedo leer tanto como me gustaría y me mantengo fiel a mis gustos.
Me encantaría conocer vuestros regalos literarios, así que sentíos libres de responder a las preguntas o dejarme algún comentario.
¡Nos leemos pronto!
P.D.: La entrada se ha quedado sin imágenes porque he perdido mi batalla contra Blogger y la plantilla de diseño que utilizo. Prometo revisar esto en vacaciones para que las imágenes dejen de quedar distorsionadas, porque yo soy la primera a la que le molesta muchísimo que suceda así.
P.D.: La entrada se ha quedado sin imágenes porque he perdido mi batalla contra Blogger y la plantilla de diseño que utilizo. Prometo revisar esto en vacaciones para que las imágenes dejen de quedar distorsionadas, porque yo soy la primera a la que le molesta muchísimo que suceda así.
¡Hola Beatriz!
ResponderEliminarYo también fui fan de Tolkien en mi adolescencia. Moría por tener un anillo único. Me alegro que tú hayas cumplido ese sueño. Y más encima tienes dos!! jaja. Buena idea la de tu madre en que el segundo fuera de plata. Y me encanta que lo lleves puesto siempre y que no rompas esa tradición. Para mí también fue hermoso leer la historia sin fin de Ende, es imposible no sentirse como Bastián. Yo también regalaría El hobbit, siempre que puedo lo regalo jaja. Me da pena a veces, porque no siempre lo leen.
¡Saludos!
Ay, Ricardo, la gente no valora lo maravilloso que es El Hobbit. Puede que cueste un poco entrar, pero es una lectura mucho más ligera que El Señor de los Anillos y al mismo tiempo te mete de lleno en el mundo de la Tierra Media.
ResponderEliminar¡Saludos!